Inteligencia artificial aplicada a la conducción autónoma para cosechadoras en grandes extensiones de terrenos donde se utilizan este tipo de maquinaria de grandes dimensiones, con una tecnología que permite clasificar los tipos de objetos detectados, diseñar una trayectoria, etc.
¿Qué es la conducción autónoma para cosechadoras?
En primer lugar, hay empresas que se dedican al desarrollo de tecnología para que las máquinas cosechadoras realicen un trabajo totalmente automático debido a que controlar este tipo de maquinaria es muy complejo y se requiere personal altamente cualificado para ello. Ya que el personal cualificado no abunda, cada vez más se estudia en esta conducción autónoma para cosechadoras.
Sistema Cognitive Agro Pilot.
Se ha diseñado, entre otros, un sistema denominado “Cognitive Agro Pilot” que utiliza la inteligencia artificial para controlar esta tarea autónoma de las cosechadoras. Un sistema basado en la captura de vídeo con cámara que permite establecer una red neuronal especifica para tareas agrícolas.
Por lo contrario, existen otros sistemas que utilizan tres o cuatro sensores LIDAR, escáneres Láser y cámaras para controlar los movimientos. Sin embargo, el sistema Cognitive Agro Pilot utiliza un solo sensor, lo cual le permite reducir el precio de la automatización.
Detectar tipo de objetos.
Detectar posición de los objetos.
Construir una trayectoria para la cosechadora.
Enviar comandos para que la cosechadora realice maniobras.
¿Qué empresa trabaja con este tipo de conducción autónoma para cosechadoras?
Ciertamente, la utilización de este tipo de maquinaria es necesario para extensiones de terreno agrícola muy amplias. Un ejemplo de ello es el Grupo Rusagro, cuya sede está en Moscú. Con unas reservas de tierra de más de 665.000 hectáreas, el Grupo Rusagro se ha asociado con Cognitive Pilot dentro de la iniciativa de Economía Digital de la Federación de Rusia.
Asimismo, Cognitive Pilot es una compañía que estudia innovación para ciudades inteligentes, estudio de sistemas radar 4D, innovación en tecnologías automotrices y agrícolas.
Como resultado, el Grupo Rusagro instalará este sistema en 242 cosechadoras divididas en varias regiones del país, implementando los sistemas autónomos durante 2020 y 2021. Asimismo, el Grupo asegura que se trata de un proyecto de robotización más grande del mundo dirigido a máquinas agrícolas dentro de una explotación agrícola.
«La escala del contrato firmado, que representa el récord mundial para la automatización de la flota de maquinaria agrícola, refleja la demanda de este tipo de tecnología y ayudará a acelerar el desarrollo de esta competencia en el país», dijo Alexander Vedyakhin, primero vicepresidente de la junta de Sberbank.
¿Cómo funciona el sistema de conducción autónoma para cosechadoras?
Ciertamente, el sistema necesita de un operador, pero no se deberá centrar en la conducción de la máquina, sino que debe concentrarse en controlar los parámetros de recolección, tales como el ángulo del cabezal, el sistema de limpieza del grano recolectado, la configuración del proceso de trilla, etc.
El sistema no se basa en una señal GPS, por lo tanto, puede trabajar en zonas cuya señal de satélite es baja.
Trabajar en campos arados y sin arar.
Trabajar en campos segados y sin segar.
Detectar obstáculos.
Advertencia cuando la cosechadora se desvía de la ruta.
Monitorización de movimiento de la cosechadora en tiempo real.
Finalmente, cabe destacar la tecnología robótica utilizada para esta conducción autónoma para cosechadoras, si bien, algo parecido a la tecnología con brazos robóticos utilizada en el Rover de la NASA hacia Marte, pero que necesita todavía de un operador dentro de la máquina cosechadora. En un futuro, seguro que se realizará totalmente autónoma esta tarea, pero en la actualidad, con este sistema, la productividad laboral del operario aumenta hasta un 20%.